"¿Y POR QUÉ NO?" - contestaba él, mientras me miraba muy serio esperando una razón.
Más de una vez me di cuenta de que no la había. Que de verdad no sabía por qué no...
Es una pregunta que intento hacerme desde entonces......Y es que muchas veces decidimos hacer o no hacer según que cosas, según que preguntas, según que actuaciones, porque damos por hecho otras sin motivo alguno.
A veces simplemente hay que pensar un poco más allá, preguntarnos de verdad ¿y por qué no? para abrir nuevas puertas, nuevas posibilidades que ni siquiera habías contemplado.
Que fantástico es seguir descubriendo nuevos caminos.
Os lo recomiendo ;)
Buenas noches.
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