domingo, 17 de julio de 2016

Reconectar

A veces uno está tan entregado a cosas, causas o personas que es capaz de olvidarse hasta de si mismo.

Llegamos a ponernos en un segundo o tercer plano que dista mucho del primero del que nunca se debiera salir. 

Lo bueno es que ese primer plano puede acoger nuevos inquilinos.

Si lo merecen, todos caben. 

Todo cabe, pero lo que no puede, ni debe hacerse es dejar la "casa" perfecta, hasta mejorarla para cederla y tú irte a la escalera. Porque de repente un día te duele la espalda, y si te descuidas, no eres capaz de ver la causa.

Hagas lo que hagas, no te olvides de ti. De lo que te gusta. De lo que quieres y mereces. Entrégate al máximo pero sin llegar a desconectarte de ti mismo......Mantén tus preocupaciones, grandes o pequeñas, tus necesidades, tus aficiones y tus mínimos y estándares. MANTENTE. 

Es hora de reconectar.

Algo me ha hecho reflexionar sobre esto hoy. 

Y he vuelto a coger mi guitarra. He vuelto a cantar. He vuelto a escribir. Y he vuelto a recordar lo que necesito, busco, quiero y merezco (y  lo que no).

Lo tengo más claro. 

Estoy más feliz. 

Buenas noches.