Esta mañana, mientras tomaba el primer café y miraba por la ventana, me he dado cuenta de que los cristales daban ya casi pena......Si, si....ni sentido de la vida, ni leches.....Sólo he pensado, "que asco de cristales", así que bayeta en mano, han ido cayendo uno a uno..... y ya que estaba, la escoba ha sustituido a la bayeta, la fregona a la escoba, y he acabado limpiando la casa, la terraza, sacando la basura, "ordenando la habitación del pánico", poniendo un lavavajillas y dos lavadoras.
Yo sólo quería limpiar los cristales, me decía cuatro horas después cuando por fin me duchaba. Y al salir a mirarlos, espetaba un "hay que joderse" al comprobar que fuera, y tras meses sin hacerlo, estaba lloviendo....
Interiormente he pensado, "típico en ti nena".........pero ahora, al entrar en casa y disfrutar del aroma a limpio limpísimo, me he dicho que quizá los cristales vuelvan a estar sucios, pero si no hubiera sido por ellos, la casa no reluciría.
A veces, sólo hay que empezar, sin pensar demasiado.....sólo hay que dar un primer paso que nos llevará sin pensarlo al siguiente y éste al otro, y otro más......y aunque el comienzo sea torpe, aunque parezca que no sirve para nada, recuerda que si no arrancas, nunca avanzarás....
Y esto es lo que los cristales sucios me han enseñado hoy ;)
No se, quizá mañana los vuelva a limpiar
Buenas noches.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
ya sabes...