Hoy he conocido una técnica japonesa llamada Kintsukoroi.
Se trata de la recuperación de piezas de cerámica que se han roto, uniéndolas con una pasta especial hecha con partículas de oro, plata o platino que destaca las grietas por donde un día esa pieza se rompió y más tarde se arregló.
El Kintsukoroi convierte la pieza en una aún mejor que la original, pues esas grietas cuentan una historia que convierten ese objeto en uno más valioso, más interesante, más bello.
En seguida ha venido a mi cabeza una imagen. La de las supervivientes del Cáncer de mama, tras una mastectomía.
Entiendo perfectamente que en un mundo en el que a priori parece que la imagen es más importante que cualquier otra cosa, que ésta cambie, se convierta en un tema difícil de aceptar y asumir con naturalidad.
Pero como en la cerámica japonesa, el Kintsukoroi nos recuerda la importancia de esas "cicatrices". Evidencian una historia, una que no es agradable pero que seguro te enseñó, te fortaleció, te hizo luchar y apreciar muchas cosas que hoy sigues recordando y valorando como una lección magistral. Y ello te convierte en una superviviente, en una luchadora, te convierte en una persona más interesante, más fuerte, y aunque no lo creas, más bella.
Siéntete orgullosa, eres una Mujer Kintsukoroi ;)
*Imagen de la página de facebook de Nandy & yo.
https://www.facebook.com/pages/Nandy-yo/1377590842495242
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