Casi había olvidado lo bien que se siente uno cumpliendo propósitos. Cosas que haces por ti mismo, para ti mismo.
A veces importantes, otras más mundanas o incluso simplemente pequeños cambios.......pueden suponer otros enormes!
Y una vez en el buen camino, con esa increíble satisfacción que te da el saber que SI PUEDES, te preguntas ¿por que no lo habías hecho antes? ¿Que te detenía?, si en realidad querías, ¿por que no lo hacías?
Nos auto imponemos limitaciones estúpidas, vagueamos y nos rendimos antes de empezar anteponiendo cualquier excusa al valor o al esfuerzo que supone intentarlo.
¿Tenemos miedo de fallar?¿De no conseguirlo? Supongo que nos parece mejor no arriesgarse y dejar las cosas en "barbecho", antes que cerciorarse de que finalmente no fuimos capaces.
A veces el "no puedo" por esto o por lo otro, te da tiempo, pospone el resultado y nos da una excusa para ni siquiera probarnos.
Más nos valdría ser más osados, más valientes pues así como somos capaces de cosas horribles, afortunadamente también lo somos otras increíbles que empiezan con un mínimo cambio.
Como decía Albert Einstein, hay una fuerza motriz mayor que la electricidad, el vapor o la energía atómica: la voluntad humana.
Me aplico el cuento ;)
Buenas noches.
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